Aquel verano sus padres tiraron la casa por la ventana. Un mes en Londres para aprender el idioma, que sin inglés no vas a ninguna parte, decía su madre. Después quince días en un campamento deportivo, que al niño se le da bien el balón y cualquier día nos retira, decía su padre. Y ambos coincidieron en que al menos debía pasar otras dos semanas en Madrid con la tía Angustias que está muy bien relacionada y las niñas van a clase con la hija de una prima segunda de los Borbones.
Entre tantas idas y venidas Mario pasó unos días en el pueblo y cuando volvió a clase, en su primera redacción lo tuvo claro.
"Este verano he ido al río. Yo no sé cazar ranas pero al Largo se le da muy bien y cogimos una de San Antón. Se la quedó él pero le puso mi nombre. El Largo sabe mucho de animales y de muchas cosas. Yo de mayor seré veterinario y cuidaré sus vacas".
Entre tantas idas y venidas Mario pasó unos días en el pueblo y cuando volvió a clase, en su primera redacción lo tuvo claro.
"Este verano he ido al río. Yo no sé cazar ranas pero al Largo se le da muy bien y cogimos una de San Antón. Se la quedó él pero le puso mi nombre. El Largo sabe mucho de animales y de muchas cosas. Yo de mayor seré veterinario y cuidaré sus vacas".
Puck
15 comentarios:
En el pueblo fue libre.
Y disfrutó.
Besos.
No importa lo que sea si le hace feliz.
Qué ciegos los padres.
¡Un abrazo!
Es que el agua lo puede todo!
Abrazos!!!
Y es que muchos no conocen ni las ranas de los estanques de ciudad. Por no conocer, no conocen a la Rana Gustavo.
Blogsaludos
Los pueblos y las charcas con ranas son la mejor atracción para los niños...
Besos desde el aire
Nada más lindo que tener una rana con tu nombre.... :)
Me encantó..!!!
En el huerto que tienen mis padres en el pueblo hay un montón de ranas de San Antón, y por las noches croan al unísono.
Simplemente delicioso. Me ha encantado. Besos de color verde.
Buenísimo!!!
eljardindemiduende
Solo cuando lo dejan a su aire encuentra la felicidad.
Detesto esos padres obstinados en que los niños hagan mil actividades, sin preguntar...
Con lo facil es hacerles felices.
Besos Puck, preciosa entrada.
Toro, felicidad y libertad van de la mano
montse, y para eso no hay claves, cada uno tiene su "rana" :-)
Javier, a veces se intenta hacer las cosas demasiado bien...
Sucede, agua de charca de ranas jeje
Adivín, ainsss la reportera más dicharachera del barrio Sésamo...
Rosa, no tengo pueblo como tal pero siempre he creido que tienen una magia especial
Reina, jeje es un buen regalo, sí
manu, no sé yo si a la hora de dormir te parecerán entonces tan simpáticas mis amigas jeje
Sara, muchas verdes gracias
Elia, gracias
Gala, a veces hacemos difícil lo facil
Gracias a todos por los comentarios. Muchos ya sabéis el cariño que le tengo a esta rana de San Antón. Poco a poco le irán acompañando otras ranas que ya han ido llegando a la charca, pero todavía hay sitio ¿eh?. Ya sabéis, podéis enviarlas a: losjardinesdepuck@gmail.com
croack, croack
Yo, que me he criado en un pueblo donde había campos para jugar, charcas con ranas para cazar, arroyos para ensuciarse de barro... comprendo perfectamente al niño. Sin duda, lo mejor del verano. Un abrazo.
Un texto con una gran ternura, y un blog que me da paz... te lo aseguro.
Besos.
HD
Mar, y es algo que no ha cambiado con el tiempo... por mucha tv, consolas, ordenadores... la libertad y la naturaleza son inigualables
Humberto, gracias, y ya sabes, la charca está abierta a todas las ranas, sapos y otros batracios. Si tienes alguno por ahí...
Saludillos
croack, croack
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